Los Pumas perdieron ante un Sudáfrica flojo
El seleccionado argentino de rugby perdió frente al campeón del mundo, Sudáfrica, por 38 a 21 en la que fue la despedida del Championship que quedó en manos de Nueva Zelanda, que más temprano le había ganado a Australia por 40 a 17. Pese a las críticas que han recibido al comienzo del torneo, los All Blacks terminaron un punto por encima de los Springboks y se llevaron el festejo final.
El juego se disputó en el estadio Kings Park de Durban y la poca ventaja en resultado impidió que los Springboks se consagraran, ya que necesitaban una diferencia de 39 puntos más el bonus para arrebatarle el título a los All Blacks.
Si bien los Pumas finalizaron en el último lugar, el equipo orientado por Michael Cheika tuvo un mejor papel que en la última edición del torneo cuando, dirigidos por Mario Ledesma, el equipo nacional se despidió sin ganar un partido. En la presente edición tuvieron un destacado triunfo ante Australia, en San Juan y uno histórico, ante los All Blacks en Nueva Zelanda.
En Durban, Sudáfrica no hizo un gran partido y más bien aprovechó lo que le sirvió la Argentina, principalmente en la primera mitad. La recuperación de Los Pumas para el segundo tiempo, cuando llegó a quedar a tres puntos de la paridad, no dejó una mejor impresión del equipo, que vio cuatro amarillas y por consiguiente estuvo un jugador menos el equivalente a un tiempo.
Desde su llegada Cheika advirtió que el verdadero objetivo está puesto en el Mundial del año próximo en Francia. El australiano se apuntó muchos progresos en el equipo que pueden ser esperanzadores para el propósito que se avecina.
Los aspectos flojos, esos que están a la vista, todavía necesitan trabajo. Aunque últimos y con sus errores recurrentes exacerbados en el partido final, Los Pumas no seguirán trabajando en busca de un milagro, sino de un salto de calidad que les permita sostener el protagonismo.
