La transición hacia las energías renovables: un cambio hacia el futuro en Mar del Plata
La creciente necesidad de soluciones energéticas sostenibles y limpias ha puesto en primer plano las energías renovables, y Mar del Plata no es ajena a esta tendencia. A medida que la industria y las instituciones avanzan hacia un modelo más consciente y eficiente en cuanto al consumo energético, las tecnologías de energías renovables se vuelven una opción cada vez más viable y competitiva. En este contexto, las declaraciones de Alejandro De Grandis, director de DG Servicios, y Fernando Scholtus, decano de la UTN Mar del Plata, nos dan una visión clara de cómo la ciudad y las instituciones se están adaptando a este cambio.
Según Alejandro De Grandis, aunque la adopción de las energías renovables aún puede parecer algo lejano, lo cierto es que las tecnologías necesarias ya están disponibles en el país desde hace varios años. "Parece lejano, pero no lo es. Las tecnologías ya las tenemos e incluso las vemos instaladas en muchos lugares", destacó De Grandis, quien señaló que la transición hacia estas energías limpias es cada vez más evidente. "El impacto que tiene para las empresas y para la ciudad es que se están volcando a estas alternativas", agregó.
Uno de los factores claves en este proceso es el contexto socioeconómico actual. La industria empieza a ver en las energías renovables una opción competitiva a nivel de inversión, con beneficios tangibles a corto plazo. Para las instituciones, como escuelas o universidades, esta transición no solo implica un ahorro económico, sino también una valiosa fuente de recursos para la capacitación y el desarrollo de proyectos educativos relacionados con las energías limpias.
"El cambio hacia las energías renovables es parte de un cambio de paradigmas más grande: cuidar lo que consumimos y darle valor a lo que tenemos", afirmó De Grandis. En este sentido, el uso eficiente de recursos naturales como el sol, el viento y el mar se está convirtiendo en una necesidad de adaptación a los tiempos actuales, no solo en términos ambientales, sino también económicos.
De Grandis explicó que el proceso de generación de energía renovable pasa por varios pasos: desde la captación de los recursos naturales hasta su almacenamiento y consumo. La energía mareomotriz, por ejemplo, aprovecha las subidas y bajadas del mar para generar electricidad, un recurso que Mar del Plata, como ciudad costera, tiene la ventaja de poseer.
Por su parte, Fernando Scholtus, decano de la Universidad Tecnológica Nacional (UTN) de Mar del Plata, destacó la importancia de avanzar hacia las energías renovables no solo como una necesidad ambiental, sino también como parte de un proceso de conciencia y formación. "Este tema lo venimos conversando hace mucho tiempo. Con el municipio de Lobería, por ejemplo, estamos trabajando fuertemente en la implementación de proyectos como una granja solar en el campo universitario", explicó Scholtus.
El proyecto de la granja solar tiene como objetivo no solo instalar paneles solares en un espacio específico, sino también generar un impacto educativo y formativo sobre las energías limpias. La UTN Mar del Plata lleva tiempo trabajando en la implementación de tecnologías que permitan aprovechar las energías renovables para reducir costos y generar energía de manera más eficiente.
Scholtus también hizo hincapié en la viabilidad económica de las energías renovables, especialmente cuando se trata de empresas o instituciones con grandes consumos energéticos. "Las facturas de luz mensuales para una institución o empresa pueden ser muy altas, pero la energía solar es una alternativa que no solo se justifica por la necesidad económica, sino también por su estabilidad a largo plazo", afirmó.
Tanto De Grandis como Scholtus coincidieron en que el futuro de la ciudad debe ser cada vez más dependiente de fuentes de energía limpias y renovables. Las energías solares, eólicas y mareomotrices tienen un enorme potencial para transformar la matriz energética local, haciendo que Mar del Plata sea no solo más eficiente, sino también más sostenible.
La implementación de estos proyectos es más que una tendencia. Es una necesidad, un compromiso con el futuro y un paso firme hacia la construcción de un Mar del Plata más limpio y más verde. Con el respaldo de empresas y universidades como la UTN, que promueven activamente la formación de profesionales en este sector, la ciudad se perfila como un referente de innovación y compromiso ambiental en el país.
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