Peñarol y Quilmes no transitan su mejor temporada en la Liga Nacional. Ambos están comprometidos en la lucha por los últimos puestos de la tabla y deberán enderezar sus caminos en la recta final de la temporada para evitar los playoffs por el descenso.

A ambos le quedan siete partidos y se enfrentarán entre sí en la última fecha, en un juego que promete muchas emociones y podría ser definitorio. A la pelea se suman Argentino de Junín, Atenas de Córdoba y Bahía Básket.

El próximo partido de Peñarol será este domingo ante Boca, en el Polideportivo, y luego el miércoles ante Obras también de local. Cinco días después, volverá a enfrentar a Obras pero en el Templo del Rock, irá al Pando para un difícil juego ante San Lorenzo y cerrará la gira en Comodoro Rivadavia ante Gimnasia.

Los últimos dos partidos serán como local. Ante La Unión de Formosa el 7 de mayo y cerrará en el clásico contra Quilmes el 12 de mayo. Actualmente, lleva un récord de 11-20.

Quilmes aparece más abajo, con dos victorias menos (9-22). Su próximo juego tendrá lugar el martes en el Polideportivo ante Obras y luego comenzará una gira de cuatro partidos con un duelo clave en el medio. Primero Quimsa, luego Olímpico, después Instituto y el cierre ni más ni menos que con Atenas.

Después vendrán los dos juegos en el Polideportivo para cerrar la fase regular. Uno contra La Unión de Formosa y el mencionado juego ante el "Milrayita".