IDRA ya es un club y presentó su ambicioso proyecto de cancha propia
IDRA consiguió la personería jurídica y se convirtió en Club IDRA. Además, anunciaron el proyecto de cancha propia que llevarán adelante en Camping de la Mutual de Casineros.
Los sueños se trabajan y de a poco, con el correr del tiempo, en un trabajo cotidiano y sin freno; se terminan convirtiendo en realidad. El 21 de abril de 2024 quedará marcado en la historia de IDRA como el inicio de una nueva etapa.
En la sede del Colegio, se hizo la presentación de la Asociación Civil Club Deportivo y Cultural IDRA, lo que se empezará a conocer como Club IDRA. Con la personería jurídica obtenida, se formó la primera Comisión Directiva encabezada por María Fernanda Cáceres Quiroga.
Pero no se quedaron sólo con esa gran noticia, sino que inmediatamente diagramaron un proyecto para llevar adelante el otro paso fundamental para el Club: tener su propia cancha de césped sintético.
COMISIÓN DIRECTIVA DE IDRA
Presidenta: María Fernanda Cáceres Quiroga
Vicepresidente: María Gimena Palacios
Secretaria: Mariela Inés Acuña
Tesorero: Daniel Norberto Porto
Protesorera: Analía Rossana Ponzecchi
Vocales titulares: Javier Ramón Baccaria, Elsa Liasch y Silvana Gabriela Carrera
Vocal suplente: Juan Mario Morales Balbiano
Revisoras de cuenta: Valentina Barros y Julieta Isnardi
Para ello, necesitaban un espacio y pudieron conseguir un acuerdo por 20 años con la Asociación de Empleados de Administración, Maestranza y Servicios de los Casinos Nacionales donde contarán con dos hectáreas para desarrollar el ambicioso proyecto. Tres jugadoras del club que son arquitectas, hicieron todo el diseño que no sólo incluye la cancha, sino también la construcción de un estacionamiento, quincho, gimnasio y vestuarios.
Se trata sólo de un paso más dentro de un camino que ahora perseguirá otros objetivo: juntar el dinero para empezar a pagar la superficie sintética y luego, para comenzar con la construcción que establece la base de la misma. Para ello, se anunció un plan de recaudación de dinero con la venta de parcelas, la adhesión de socios y sponsoreo que harán de manera progresiva.
Todo se hizo en el marco de una sencilla y emotiva ceremonia donde el compromiso es empezar a trabajar con las familias del club para que toda la comunidad participe en este nuevo emprendimiento. Como todo lo que se han propuesto hasta ahora, seguirán dando pasos firmes, quizás algunos sean más pequeños y otros se transformen en zancadas que permitan avanzar un poco más rápido.
A su tiempo, todo llegará, porque los sueños se trabajan y los que hacen el nuevo Club IDRA saben de trabajar en pos de un objetivo común. Ya tienen su propio nombre, ya saben que con el sacrificio, el trabajo comunitario y la paciencia, todo llega. La cancha será sólo cuestión de tiempo, pero más temprano que tarde, cumplirán con este nuevo paso de su corta pero prolífica historia.
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