Cooperativa Oktupak: "Los hijos de los internos tendrán un ejemplo de cultura del trabajo"
Luego de que el Concejo Deliberante reconociera el trabajo permanente realizado por la cooperativa 'Oktupak', que tiene como objetivo la reinserción de los convictos al mundo del trabajo, su presidente Juan Manuel Aiello habló con UPM y comentó sobre el trabajo que se realiza actualmente desde el penal de Batán.
Oktupak es la primera cooperativa de trabajo que funciona en un penal, con internos cooperativistas, y nació en el penal de Batán. La cooperativa se constituyó ante la dirección de Personas Jurídicas de La Plata en 2020, en plena pandemia de coronavirus, cuando los presos temían contagiarse y las fake news sobre liberaciones masivas alteraban a la opinión pública.
En ese contexto, Aiello señaló: "La cooperativa nace como consecuencia de un trabajo iniciado en 2009, por el Juez Esteban Viña, cuando introdujo el deporte en la cárcel como herramienta educativa. Este programa de la ONG 'Cambio de Paso' fue creciendo hasta lograr tener dos módulos para aquellos que adherían al programa".
"Esto no es solo una cuestión de beneficio, sino que es un desafío ya que para poder participar del programa, los internos deben estudiar, trabajar, terminar la primaria o secundaria y realizar capacitaciones. Eso fue tomando volumen. Después nos encontrábamos con que era muy difícil que fueran absorbidos laboralmente una vez cumplida la pena", continúo.
"Así surgió la idea de armar esta cooperativa, para poder sumarlos al terminar la pena. Hace más de un año estamos con un taller de carpintería y herrería constituido en la cárcel de Batán, como una pata de la cooperativa", explicó.
Al ser consultado por los trabajos realizados desde la cooperativa, Aiello expresó: "En estos 14 meses de trabajo dimos capacitaciones en carpintería y herrería, lo que es marca un cambio comportamental de los internos. Cada cual hace una tarea, como las vallas que le vendieron al Envial. Esto nos dio la posibilidad de proveer al estado y ahora esperamos alguna nueva orden de trabajo".
Por otra parte, sobre la existencia de algún subsidio que ayude al desarrollo de las actividades, el presidente de la cooperativa señaló: "Cuando arrancamos el año pasado comenzamos de cero. Comenzamos trabajando con materiales recuperados y reciclado porque necesitamos transformar esos materiales en objetos que nos den entrenamiento".
En relación al rugby, ya que Aiello también es el entrenador del equipo carcelario, y de los valores que este deporte pregona, indicó: "Cualquier acuerdo colectivo que tengamos implica respeto y disciplina, eso viene del mundo del deporte. Jugar nos enseña a resolver problemas espontáneos, pero por sobre todas las cosas los juegos se dan en un marco de acuerdo social, no es exclusivo del rugby".
"El deporte es una conveniencia social que muestra las reglas de convivencia. Ojalá en la vida social tuviésemos las reglas de vida del club. Hemos transformado este espacio de la cárcel de Batán en una fábrica. Este trabajo tiene un resultado inmediato con estos internos y estamos convencidos que le da un futuro distinto a los hijos de los internos, quienes tendrán un ejemplo de cultura del trabajo. Verán a un trabajador, en vez de a un simple preso”.
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