Luego de que el municipio de General Pueyrredon enviara un pedido a la Provincia de Buenos Aires, para que permita la flexibilización de diferentes actividades, los viveros reabren sus puertas para la venta presencial, en sus establecimientos.

"La expectativa es mucha, porque después de tantos meses sin actividad todo el sector realmente a sufrido. La mayoría somos empresas Pymes, empresas familiares, por lo que realmente nos ha costado mucho trabajo mantener todos los puestos laborales, con los sueldos correspondientes", manifestó Nicolás Antoniucci, responsable del Vivero Antoniucci, en declaraciones a El Marplatense.

En cuanto a como han transitado estos meses de cuarentena desde el sector Antoniucci sostuvo que "con el vivero totalmente cerrado y escuchando todo el tiempo que íbamos a tener ayuda para el sector, para las Pymes, sin que lamentablemente se materializara ninguno de los anuncios. Esto era algo que esperábamos con mucha necesidad, ya sea el crédito para pagar los aguinaldos, como el subsidio para los trabajadores".

"Sin tener la posibilidad de facturar, o de ingresar divisas, es imposible realmente pagar los sueldos. Uno lo va haciendo con ahorros, pero los ahorros se acaban",afirmó.

En referencia a la atención, teniendo en cuenta las medias de prevención "el protocolo que debemos cumplir es bastante extenso, son 17 páginas, pero básicamente los viveros tenemos una gran condición, que es que tenemos un espacio, que siempre supera la mitad de las superficies, que son superficies abiertas, por lo que esto beneficia mucho el tema del distanciamiento social, por un lado y por otro el hecho de que no somos negocios de afluencia masiva, condiciones que son una verdadera ventaja", subrayó Antoniucci.

"Todo nuestro personal estará trabajando con las máscaras transparentes, las desinfecciones permanentes, que en el caso nuestro tenemos una persona exclusivamente, desinfectando con lavandina los pies de los clientes y las manos con alcohol y a su vez también se desinfectan todos los carritos, ni bien los dejan los clientes", detalló.

"De todas maneras gracias a la experiencia piloto que realizó el intendente Montenegro, pudimos apreciar que el marplatense promedio que viene al vivero, realmente está muy bien dispuesto a acatar las nuevas normativas. Hay mucha voluntad de colaborar en ese aspecto, por lo que se hace muy simple y sencillo la implementación del protocolo", destacó.

En cuanto a lo que viene para la actividad en el sector, Antoniucci indicó que "realmente estamos alegres por un lado, teniendo en cuenta que volvemos a la actividad, pero con preocupación por el otro, por la situación en general. Los esfuerzos son enormes, pero quiero agradecer al personal del Vivero Antoniucci, que siempre se ha mantenido con la camiseta puesta, siendo muy voluntariosa y siempre con ganas de salir todos juntos adelante".