La manzana es una fruta que ofrece muchos beneficios; contiene vitaminas, minerales, antioxidantes y grandes cantidades de fibra.

Esto las hace efectivas para incluirlas en la dieta porque además pueden ayudar cuando se intenta bajar de peso dado que aportan muy pocas calorías y saciedad.

Un 80% de su composición aporta agua por lo que contribuye a una buena hidratación y combate la retención de líquidos. Es diurética y depurativa gracias a la cisteína que contiene. Además, ayuda a regular el tránsito intestinal.

Dieta de la manzana

La dieta dura cinco días y tiene como protagonista a esta fruta:

Primer día: solo se permite comer manzanas y beber dos litros de agua diarios.
Segundo día: se deben consumir manzanas en el desayuno y en la cena. En el almuerzo se puede consumir una ensalada verde pero sin aceite.
Tercer día: a partir de este día el desayuno debe incluir pan integral, manzana y pavo o un huevo cocido. Durante el almuerzo se puede elegir una ensalada verde y en la cena nuevamente manzanas.
Cuarto día: se puede almorzar verduras al vapor y atún y para cenar cereales con leche descremada.
Quinto día: en el almuerzo se debe incluir una carne al horno y ensalada verde y para cenar de nuevo manzanas.

Contraindicaciones

Es una dieta poco recomendada por los especialistas de nutrición y si bien al seguirla provoca una bajada brusca de peso al retomar la alimentación habitual los kilos perdidos tenderán a ser recuperados.

Debido a la carencia de nutrientes y su baja ingesta calórica puede producir mareos, dolor de cabeza, cansancio, irritabilidad o fatiga por lo que es una dieta para hacerla sólo durante unos pocos días.

dieta de la manzana