Abel Pintos cerró el año vibrando a pura fiesta en La Plata
Abel Pintos volvió al Estadio Único Diego Armando Maradona de la Ciudad de La Plata para cerrar el 2022 con un show único, en una noche única, donde el artista repasó durante casi tres horas de concierto las canciones más populares de su carrera.
Tu voz, Oncemil, La llave, Pájaro Cantor, Motivos, De solo vivir, Aventura, Cien Años, Espejo, El Amor en mi vida, El Hechizo, Piedra Libre, Abrazándonos, Sin principio ni final, El Mar… fueron parte de la lista de 36 canciones que el artista le regaló esta noche a su público
Hace varios meses cuando se anunció este concierto Abel se había expresado diciendo que “la vida está llena de momentos que suceden una sola vez. Incluso en la rutina, en la repetición, hay momentos que son únicos. El momento del primer paso, del primer beso o en el que decidís cambiar algo, es único. Todo lo que vivimos, todo lo que nos pasa, es tan único como la vida misma. Así, de esa manera, el 10 de diciembre vamos a vivir una noche única en el Único”. Y logró cumplir este sueño junto a la Familia Abelera que celebró esta noche inolvidable.
El concierto contó además con una hecho destacado e inédito, a partir de una iniciativa solidaria ideada por el artista, Marcelo González y Jorge Quinteros, responsables de Plan Divino, a partir de la cual 1000 estudiantes con discapacidad visual pertenecientes a distintas escuelas de educación especial de la provincia de Buenos Aires, fueron invitados a presenciar el concierto.
Para esto - en coordinación con los Ministerios de Educación de la Nación y de la provincia de Buenos Aires; los responsables de dirección de escuelas especiales de la provincia; y directores y directoras de estas instituciones – se organizó un operativo que movilizó a más de 100 micros, 300 docentes y 400 voluntarios para el traslado y acompañamiento de los chicos durante el concierto. Fue una experiencia súper emotiva y sin precedentes, ya que además de presenciar el concierto los niños se llevaron de regalo un cancionero especialmente diseñado para la ocasión impreso tanto en texto como en sistema braille. Pero el momento más impactante se dio cuando el propio Abel se acercó, una vez finalizado el concierto, a saludar personalmente a los chicos.
Sin dudas, fue una noche única que será guardada en la memoria y en el corazón de cada una de las personas que fueron parte