Tragedia en Nuevo México: tres muertos y una casa arrastrada por una inundación repentina en el pueblo de Ruidoso
Las lluvias monzónicas provocaron una crecida súbita del río que dejó al menos tres fallecidos, entre ellos dos menores. El área, afectada previamente por incendios forestales, sigue siendo extremadamente vulnerable.
Una fuerte tormenta monzónica desató una violenta inundación repentina en el poblado montañoso de Ruidoso, en el sur de Nuevo México, dejando un saldo de tres muertos, entre ellos un hombre, una niña de 4 años y un niño de 7. La intensidad del agua fue tal que una casa entera fue arrastrada río abajo.
“Tenemos el corazón roto por las familias que han perdido a sus seres queridos en esta terrible tragedia”, declaró el alcalde de Ruidoso, Lynn Crawford, en un comunicado. “Estamos unidos en el dolor y comprometidos en apoyarnos mutuamente frente a esta pérdida devastadora”.
Equipos de emergencia realizaron al menos 85 rescates de personas atrapadas en casas y vehículos, según informó Danielle Silva, vocera del Departamento de Seguridad Nacional y Manejo de Emergencias de Nuevo México.
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Aunque el agua retrocedió por la noche, los equipos continuaron las tareas de búsqueda en zonas con vehículos atrapados en el barro y caminos bloqueados por escombros. Tres refugios fueron habilitados para quienes no pudieron volver a sus hogares.
El río Ruidoso subió casi seis metros en minutos, impulsado por la intensidad de las lluvias en una zona recientemente devastada por incendios forestales. La falta de vegetación aumentó la vulnerabilidad del terreno, que no pudo absorber el agua.
Kaitlyn Carpenter, artista local, presenció el momento en que una casa fue arrastrada por la corriente. “Vi pasar una casa con una puerta turquesa. Era de la familia de una de mis mejores amigas. Afortunadamente no estaban dentro, pero ver eso fue desgarrador. Tengo recuerdos en esa casa. Fue devastador”, relató.
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El meteorólogo Matt DeMaria informó que la tormenta se formó rápidamente sobre la zona quemada por los incendios del año anterior. Los registros preliminares indican que el río alcanzó un nivel récord de más de 6 metros.
Desde los incendios del verano de 2024, conocidos como los South Fork y Salt Fires, que destruyeron más de 1.400 viviendas y estructuras, el área ha sido extremadamente propensa a inundaciones. Ese mismo año ya había sufrido episodios similares, con consecuencias trágicas.
Durante un mensaje radial, el alcalde pidió a los vecinos que informen sobre personas desaparecidas y confirmó la muerte de varios caballos en la zona del hipódromo local. “Sabíamos que habría inundaciones... pero esta nos golpeó más fuerte de lo esperado”, reconoció.
Fuente: Asociated Press
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