Peñarol vuelve de Boedo lleno de dudas
Peñarol sigue estirando su mala racha. Con más dudas que puntos, el cuadro marplatense fue derrotado por 88 a 65 en su visita al Roberto Pando de San Lorenzo, por su séptimo compromiso de la Liga Nacional de Básquetbol. Su próxima presentación será el lunes a las 21.10 ante Instituto en el Polideportivo Islas Malvinas.
El arranque de la visita fue paupérrimo y el del local, excelente. El "Ciclón" no le permitió rotar el balón y lo obligó a tirar incómodo, lo que llevó a un 0/7 para el "Milrayitas" que, además de no convertir, sufrió los dos bombazos de Córdoba que le dieron la primera ventaja de 10-1 en cinco minutos. El inicio fue un spoiler del partido.
Mientras la presión del elenco de Boedo fue positiva, cuando Peñarol lo intentó fue con falta. Y encima, en ese juego no hizo pie ante las triagulaciones rivales, que le permitieron penetrar el aro y opacar los destellos de Thornton y Monacchi. A pesar de que en los últimos segundos había achicado la distancia a ocho puntos (18-10), San Lorenzo robó tres veces en el cierre, corrió la cancha y se fue al primer descanso con 15 de distancia (25-10).
El equipo que conduce Mariano Rodríguez se rearmó con el ingreso de Julián Morales para dar una mano en defensa. El trabajo del "Cuervo" fue buenísimo, pero cuando logró correr en contraataque, esquivando la asfixia local, y también desde las bombas de Whitfield y Valinotti, recortó distancias con un 13-9 en la primera mitad del chico (34-24). Y a pesar de que el encuentro se mantuvo en tablas por cuatro minutos (40-30), las desatenciones marplatenses en el último minuto lo volvieron a dejar a quince puntos (45-30).
Y el descanso largo no cambió nada. San Lorenzo marcó la diferencia desde la intensidad y las transiciones ofensivas. El "Milrayitas" le cedió muchos espacios en los contraataques y Lugo, en su salsa, convirtió dos triples desde la esquina para llegar a la máxima de 19 puntos en 5´ del tercer cuarto (56-37). Y después de dos bombazos de Dupuy y Conrradi, se nubló para atacar y cómodo, moviendo del lado opuesto al eje, el cuadro de Costa llegó a la parte final 66 a 47.
Por encima de que no le salían las cosas, la visita se quedó sin ideas y apostó al 1 vs 1, que tampoco le funcionó. Enfrente estaban las manos calientes y del nuestro, tibias. Peñarol mostró una de las peores defensas del campeonato y con esta nueva derrota por 88-65, sumó su quinta caída consecutiva.