Nereo Champagne: “Cuando un equipo está convencido, puede lograr lo que se proponga”
El arquero que se sumará a Alvarado habló desde España en Marca Deportiva Radio (FM 99.9) sobre su regreso al país, el motivo para elegir al “Torito” y su experiencia como campeón del mundo Sub-20 junto a Lionel Messi: “la única vez que perdió el primer partido de un Mundial fue con nosotros en 2005 y también terminamos campeones”, comparó.
Por Rodrigo Divito (@rodrigodivito)
Después de un lustro fuera del país, Nereo Champagne decidió volver a atajar en el fútbol argentino y eligió a Alvarado como club para su regreso. Todavía desde España donde está preparando una difícil mudanza, el arquero habló en Marca Deportiva Radio (FM 99.9): “ya nos venía rondando en la cabeza las ganas de volver a Argentina, estar cerca de la familia, volver al fútbol argentino. El mercado pasado había quedado desfazado el mercado, me demostraron un cariño enorme y que el club está haciendo un esfuerzo improtante para crecer. Vivir de nuevo esa pasión que tenemos, me llevó a tomar esa decisión de volver”.
Fueron 5 años jugando en distintas categorías del fútbol español para volver con mayor madurez a nuestro país y tratar de seguir desarrollándose: “la verdad que todo ha sido muy positivo, de mucho aprendizaje, me tocó venir a España con 32 años de un día para el otro, estaba de vacaciones brindando para año nuevo y el 1º de enero estaba viajando a España. A la semana me tocó debutar, fue de mucho aprendizaje con momentos muy buenos en todos los equipos que me tocó estar. En Majadahonda (su último equipo) hicimos playoffs para subir a segunda con plantel humano excepcional que hizo que disfrutara mucho del fútbol”.
Uno de los puntos más importantes que le tocó protagonizar fue cuando con Leganés, eliminaron a Real Madrid de la Copa del Rey y como visitantes: “fuimos al Bernabeu a ganar ese partido porque era ida y vuelta, fuimos muy convencidos y pudimos hacerlo. Fue algo totalmente histórico, ya en semifinales con el Sevilla fue impresionante porque estuvimos también cerca de igualar la eliminatoria. Fue una experiencia increíble esos partidos”, recordó Nereo.
Hay múltiples ejemplos de arqueros que están en edades similares a las de Champagne y, sin embargo, han logrado la plenitud y la vigencia: “en Argentina ascendió Instituto con Carranza como arquero que tiene 41 por lo que tengo varios años por delante”, bromeó a modo de ejemplo. Luego destacó que “tengo mucha ilusión y muchas ganas, quiero tener ese desafío de transmitir conocimientos y aprender todos los días algo nuevo. Cuando uno crece le da satisfacción ayudar al compañero a mejorar, eso no se paga con dinero. Si uno tiene la ilusión y las ganas, puede jugar mucho tiempo, me toma en un momento de madurez muy importante para entender cosas que antes me podían perturbar. La Primera Nacional son maratones, no torneos cortos, uno se tiene que preparar para un torneo de 11 meses”.
Tendrá como entrenador a César Vigevani a quien no conocía y tuvo oportunidad de compartir alguna charla previa: “no había hablado nunca con él, se lo nota muy ilusionado con muchas ganas e ideas claras. Lo importante en el fútbol es tener las cosas claras y saber como llevarlas a cabo, si tenes eso, tarde o temprano te irá bien. En la charla que tuvimos me demostró que tiene muy claro como hacerlo”.
Desde su experiencia, siempre el grupo humano termina solidificando lo deportivo, aún cuando haya falencias: “lo importante es siempre la comunión grupal, que te permite afrontar los objetivos que tengas. Muchas veces un equipo puede ser limitado técnicamente, pero si está convencido, puede lograr lo que se proponga”.
SU EXPERIENCIA AL LADO DE MESSI
Nereo Champagne formó parte de la Selección Argentina Sub-20 que se consagró campeón del mundo en Holanda allá por 2005 y donde compartió plantel con Lionel Messi, “Kun” Agüero, Pablo Zabaleta, Fernando Gago, Oscar Ustari, Ezequiel Garay y otros nombres destacados.
Aquella experiencia, tuvo puntos de similitud con Qatar 2022 y la consagración argentina en el Mundial: “se lo dije a mi señora después del partido de Arabia Saudita. La única vez que Messi perdió el primer partido del Mundial terminó como campeón y fue en 2005 con nuestro grupo (perdieron ante Estados Unidos). Me transporté a ese momento porque el equipo empezó a crecer. Las derrotas te hacen fuerte, te unen, le tenía mucha fe por eso, sabía que se iba a unir el grupo. Las derrotas si el grupo está fuerte, no te achican, te hacen fuerte”.
Como le tocó pasar en aquella oportunidad, vio que en este Mundial hubo un grupo unido con un objetivo común: “tiene mucho paralelismo con ese grupo que pensaba en lo grupal por sobre lo individual y terminamos coronando algo que es espectacular. Esto no deja de ser un deporte colectivo, aunque sean 11 individualidades, uno tiene que matar por el otro, no hay más misterio que ese”.
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