Maradona y un nuevo homenaje: cómo es el impactante mural que recorre toda su trayectoria en el fútbol
Diego Maradona cumpliría hoy 62 años. Fue un 30 de octubre de 1960 cuando su mamá, Doña Tota, lo trajo al mundo. A partir de ese momento, en una vivienda precaria de Villa Fiorito, se inició la leyenda.
El Pelusa, para muchos el mejor jugador de la historia del fútbol, dominó la pelota y los corazones de la gente como ningún otro. Y se convirtió en un ídolo popular para el que sobran homenajes ahora que ya no está.
Es el segundo aniversario de su natalicio desde que Dieguito falleció, a los 60 años, aquel fatídico 25 de noviembre de 2020 en Dique Luján, a causa de una insuficiencia cardíaca aguda. La noticia fue un bombazo para el mundo entero. Y comenzaron los recuerdos.
Desde declarar la casa donde transitó sus primeros años de vida como "lugar histórico nacional", hasta los murales, los santuarios y los tatuajes que hoy la gente lleva orgullosa para no olvidarlo. A los pocos días de su fallecimiento, Gustavo Rovira, reconocido artista plástico, comenzó el suyo.
Un desafío particular
Su trabajo "Una gambeta a la vida" intenta plasmar la vida de Diego en un mural de 28,75 metros de ancho por 4,40 de alto. Son 23 placas de madera que deben montarse para su exposición. Una obra que tiene oro y plata incrustado en diversas partes de la misma. Según el pintor de 62 años, su obra comienza con "la llegada de un ángel a Fiorito".
Gustavo fue contemporáneo a Maradona y siente que creció en paralelo al ídolo popular. Nació el mismo año que Diego y fue al colegio ubicado frente a la cancha de Argentinos Juniors, en La Paternal, donde el Pelusa brilló con la melena al viento. Los éxitos y las caídas del Diez las vivió como propias, desde su debut hasta su retiro.
Para realizar este mural visitó aquellos sitios donde el Diez dejó su magia. Rovira pisó la misma tierra donde alguna vez jugó Maradona y se llenó de esa energía. Desde Estrella Roja de Fiorito, el primer equipo de Diego, pasando por la cancha de Argentinos Juniors, la Bombonera y el Coloso Marcelo Bielsa, de Rosario. La tierra de todos estos estadios está plasmada en el mural.
"Yo soy un tipo espontáneo y creo que lo pasional siempre gana", se confiesa Gustavo Rovira en su charla con Clarín. El artista cree que "la vida de Diego Maradona es el recorrido de la vida de cada uno de los argentinos". Y fiel a este pensamiento retrató su carrera deportiva, de principio a fin.
"Comienzo con Maradona en Argentinos Juniors, luego paso al Boca del '81 y me voy al Barcelona", explica. Por supuesto que también retrata el paso del ídolo popular con la Selección Argentina en los Mundiales de España '82 y México '86, donde se coronó campeón del mundo. Luego, sigue con la etapa del Nápoli de Italia, el Sevilla de España y Newell's.
"Continúo con el Boca del '95, la pelota no se mancha, su retiro y su etapa como entrenador de Gimnasia de La Plata", añade el artista.
"El mural finaliza con el mismo ángel que le lleva la pelota el 30 de octubre a las 7:05 de la mañana, lo toma de espaldas y se van juntos al cielo", dice Rovira emocionado.
Dónde será exhibido
La idea de Rovira siempre fue exhibir el mural, una vez montado, en el Obelisco de Buenos Aires para que todos puedan acceder a verlo. Sin distinciones. Porque para él "Diego no es de ningún equipo, Diego es del pueblo, es del mundo".
"También tengo pensado mostrarlo mientras sigo trabajando en distintos lugares de mi patria", dice. La obra está al 65 por ciento y todavía falta trabajo. Pero Gustavo no quiere apurarse porque disfruta de estar trabajando todos los días acompañado de la vida de Diego.
"Yo quiero hacer un homenaje espiritual. La idea era tenerlo terminado antes del Mundial de Qatar 2022, pero los tiempos se extendieron más de la cuenta. Por suerte estoy acompañado de la Fundación Baccigalupo, a quien Diego ha ayudado mucho en vida".
La organización que apoya diariamente al artista se dedica a promover el deporte para personas con discapacidad intelectual. Una parte de lo recaudado irá para ellos.
Una vez que sea exhibido en el país, Gustavo quiere que su obra vuele hacia "Qatar o Nápoles" a través de alguna empresa que compre la puesta pictórica y la acerque al público de otras partes del mundo.
Fuente: Clarín