Femicidio: "Era una relación tóxica, pero no esperaba esto”
Estela Álvarez, hermana mayor de Valeria Brítez, la mujer de 34 años asesinada por su pareja Walter Scott, le reconoció a El Marplatense que la relación de su hermana con el asesino era “tóxica”, aunque admitió que no esperaba un desenlace trágico. “Yo no esperaba esto. Tenían una relación tóxica pero jamás pensé que la podía agredir o matar. Yo lo quise mucho, porque él era muy bueno. Pero me mató a mi hermana menor”, explicó en medio del dolor.
“Era una relación tóxica, era del amor al odio, pero siempre volvían a estar juntos. Él hace poco había salido de la cárcel de Batán. A pesar de las peleas, tuvieron 5 hijos. Antes, mi hermana había tenido dos hijos más con su primer matrimonio. El mayor tiene 17 años y la menor tiene 2. Todavía toma la teta”, agregó Estela.
Mientras trataba de digerir la peor noticia, Estela indicó que “lo que duelen son los hijos. Los grandes lo pasamos llorando, pero ¿cómo lo viven los chicos? Yo no sé cómo hacer. Hace poco fui a la marcha 'Ni una menos' y, cuando estaba ahí, dije: 'Ojalá que nunca me pase'. Y ahora me pasó. Es un dolor tan fuerte que uno no sabe qué decir. Sólo pido justicia por mi hermana”.
Estela no puede afirmar si Walter Scott agredía físicamente a su hermana. Pero sus hermanos estaban convencidos de que le pegaba. “Yo nunca lo vi, pero mis hermanos decían que sí. Una vez la habían visto con un ojo inflamado. Los vi discutir, pero los dos se decían cosas. Pero que le pegue, no”, relató. “No recuerdo la cantidad de años que hace que estaban juntos, pero hace mucho. Siempre estaban de la mano, pero en el último tiempo cambió todo. Me parece que él se estaba drogando”, recordó.
LA MATÓ DELANTE DE SU HIJA
Estela Álvarez no puede creer que Walter Scott haya matado a su hermana delante de una de las hijas de la joven. “La mató delante de la hija, que tiene 14 años. Casualmente hoy mi hermana y la nena iban a ver el vestido de 15 años. Yo no creo que él esté bien, no es una persona así”, reflexionó. “Yo lo quería mucho a él, tengo sus fotos, lo miro y no puedo creer que haya hecho esto”, añadió.
Sobre la historia de la pareja, Estela aseguró que “él era de la zona del barrio Santa Rita y nosotros de Las Américas. Después se fueron a la casa del barrio Belgrano, donde vivieron muchos años”. “Yo quiero justicia. Uno ya se cansa de pedir justicia, pero tengo la fe de que algún día la haya, no sólo por mi hermana, sino por todas las mujeres”, concluyó.