"Es muy triste que un nene pregunte si hay comedor y decirle que no"
Para muchos chicos de los barrios Parque Peña, Fray Luis Beltrán y Parque Camet, el comedor “Amiguitos” es el único lugar en el que los espera un plato con comida. Entre tanta incertidumbre, tienen una certeza: si van hasta Tapia 6675, a las 11,30 estará Belén, junto a tres madres, para servirles el almuerzo. Hace cinco años que la rutina se repite, aunque esta semana hubo una interrupción: no había nada para comer.
“Es muy triste que venga un nene a preguntarte si hay comedor y tener que decirle que no y cerrarle la puerta”. Así de sincera, así de cruel, la reflexión de Belén Alanis grafica los sentimientos que la atravesaron en los últimos días. Afortunadamente, tras exponer la situación, las donaciones de la gente, principal y único sostén del comedor, permitirán reabrir el comedor este lunes. “Lo que hice fue salir a todos lados para avisarle a los nenes que este lunes abrimos el comedor con lo que me han traído. No es mucho, espero que la gente me siga ayudando. Pueden traer las donaciones y también puedo ir yo a buscarlas”, explicó Belén en diálogo con El Marplatense.
La alegría por la reapertura no alcanza para desterrar la preocupación. “Yo le quiero agradecer a todo Mar del Plata porque han respondido muy rápido. Pero esto tiene que seguir, no se tiene que cortar, porque si no pronto estaremos igual”, remarcó Belén. “Tengo chicos y chicas de un año a 14 años, también hay 5 mujeres embarazadas, una chica de 43 años down, que está en silla de ruedas. También tenemos dos chicos más que son down. Hay cuatro o cinco chiquitos que tienen un año y comen acá”, puntualizó.
“Lo que me da el municipio no me alcanza ni para una comida”
Desde que decidió abrir el comedor por las necesidades del barrio, Belén Alanis apenas recibe migajas del Estado. El comedor se sostiene únicamente por el aporte de la gente. “Lo que me da la Municipalidad son cinco paquetes de arroz, me alcanza ni para una comida. En estos días hablé y me dijeron que sólo me pueden dar leche en polvo, azúcar y harina. Ellos sólo pueden aportar para los merenderos, no para los comedores”, contó.
“Hay mucha gente que se quedó sin trabajo y vienen cada vez más chicos al comedor. Hace seis o siete meses que venimos con problemas porque recibimos menos donaciones”, explicó Belén. Y para cerrar, dejó en claro la situación de los chicos que concurren al comedor “Amiguitos”: “Muchos de los padres que vienen a traer a sus hijos no tienen trabajo, o los que tienen no les alcanza el dinero para vestirlos o darles de comer. Para muchos chicos, la que le damos nosotros es la única comida del día”.
CONTACTO PARA LAS DONACIONES
El comedor de Belén Alanis funciona en la calle Tapia 6655. Los interesados en realizar donaciones pueden comunicarse al (223) 155-962485.