Economía: devaluación encubierta y medidas cortoplacistas
Facundo Martínez, economista y director de Macroview y de IERAL, analizó en CNN Radio las nuevas medidas económicas implementadas por el gobierno, la suba del dólar y la consecuente remarcación de precios: "Hay una emisión crónica y cuasi descontrolada de pesos por un origen macroeconómico que hace que haya más billetes en la calle para demandar esos bienes que los bienes en sí mismo".
En CNN Primera Mañana, con Pepe Gil Vidal, Martínez estableció que las nuevas medidas son una una "devaluación hecha y derecha", sino que es una "devaluación encubierta, mezclada y enredada" que justamente busca evitar una devaluación convencional.
"Ese aumento del 7,5% que rige ese aumento del dólar a importaciones no abarca a otros bienes que Argentina exporta y forma parte de la mesa de los argentinos. Cuando se devalúe el tipo de cambio, afecta a los bienes de consumo básico que se exportan como los alimentos", explicó el especialista.
Y remarcó que lo que asusta en nuestro país es la nominalidad: "La inflación es muy alta, le imprime precios que a uno le sorprende y las cifras llegan a una cantidad de ceros que a uno lo asusta".
A su vez habló de la "situación rarísima" que vive el país: "El transfondo coyuntural y esa pandemia económica se le sumó la sequía, es un golpe muy fuerte a las cuentas de sectores externos y exportaciones cayeron alrededor del 25% y cuando eso pasa bajan las importaciones, sube el tipo de cambio y se busca financiamiento temporal. En Argentina ese ajuste no ocurrió y Massa fue por otro lugar".
"El Ministro de Economía y candidato, Sergio Massa, responde para no hacer el ajuste externo con un nuevo dólar para el agro, con un impuesto país a la compra de importaciones y que le ayuda tanto para intentar cubrir o camuflar la falta de dólares por la sequía como para acercarse a la meta fiscal del Fondo Monetario Internacional (FMI)", destacó Martínez.
Es por eso que puntualizó que el organismo internacional no quiere que Argentina se caiga porque no quiere cargar de nuevo con la responsabilidad de una crisis argentina, mientras a la vez negocia con un ministro que es candidato.
Y sentenció: "Es todo muy cortoplacista porque son medidas que buscan transitar en la semana. Se supone que en agosto, después de las PASO, se vuelve a la mesa de negociación para ver cómo llega el gobierno a octubre. Está llegando con enormes dificultades y comprometiendo el año que viene y quedan muchos meses por delante".
Por último no descartó que la gestión nacional realice un ajuste mayor después de las PASO y que el impuesto país "quede como una anécdota" ante la falta de flujo de dólares.