Crisis en seguridad: Segovia, en su peor momento desde que asumió en la Departamental
La inseguridad en el foco de la escena. Ya no solo local. Lamentablemente, el último crimen colocó a la ciudad en las principales portadas de los diarios de mayor trascendencia. No solo eso, los canales nacionales ocuparon minutos en difundir las consecuencias que la falta de prevención ha puesto entre las prioridades que piden los vecinos en los últimos meses.
El 2 de marzo José Segovia fue puesto en funciones al frente la de Departamental de policía, en reemplazo de Lucio Pintos. Por entonces titular de la DDI de Investigaciones salió airoso de una profunda barrida de máximas autoridades que no solo puso en disponibilidad a Pintos sino al Superintendente, el general Guillermo Villegas.
Segovia armó su tropa propia. Con la promesa de la máxima autoridad ministerial de mejorar el patrullaje, porque "los móviles no llegan a los barrios", recalcaron oportunamente.
Y cuatro días más tarde, la ciudad ya contaba con el primero de los 23 homicidios que hubo en Mar del Plata al día de hoy. Más de tres asesinatos por mes desde la llegada de Segovia. Un total de 33 desde el 1 de enero de 2021. Cifras frías, pero que nadie puede ignorar.
"Nadie lo responsabiliza", comentó una alta fuente de la seguridad provincial. "Las quejas de concejales y vecinos, le pasan por el costado. Algunos le apuntan a Montenegro, otros a la secretaría de Seguridad, pero nadie a Segovia", comentó más crítico.
Además de los puntos conflictivos como la Zona Roja, las constantes solicitudes que emanan desde los vecinos de los barrios El Martillo, Autódromo, Parque Palermo, La Herradura donde piden a gritos mejor prevención y patrullaje para que no les roben cuando salen a trabajar, por citar un ejemplo concreto de lo que ocurre.
Acaso sirva esto último como dato claro: Lele Gatti salía de trabajar ni más ni menos. El DJ quedó desamparado luego de sus labores y fue ejecutado de un tiro en el corazón por dos delincuentes a bordo de una moto en contramano por la calle interior de Playa Grande, llamada Guillermo Volpe. ¿Nadie observó nada?.
El crimen del DJ de Mr. Jones fue el número 23 en la gestión del Jefe Departamental de policía.
José Ochandío fue la primera víctima desde su asunción, el 6 de marzo. Recibió más de 20 puñaladas en su domicilio. Desde allí hasta hoy se vivieron situaciones de todo tipo. Al otro día un doble crimen por una pelea en Fray Luis Beltrán.
Pero, el mes más crítico fue julio donde se registraron 10 crímenes. Ahí se puede encontrar desde lo más espeluznante hasta un homicidio tras una discusión de tránsito.
Seguramente el crimen protagonizado por un sujeto sobre su padre que luego escapa y choca en la costa, puede ser uno de los más recordados. Pero, no olvidar al hombre que se halló ahorcado en un restó de San Lorenzo y San Luis; el cadáver de un hombre junto a su moto; la mujer que asesinó a su pareja en la cama y dijo que se había caído; el ladrillazo sobre la cabeza a Hugo Monzón, en Punta Mogotes.
El 9 de julio se tiñó de sangre: Jonathan Sanche que cumplía arresto domiciliario fue ejecutado de un balazo. Había sido condenado a 14 años de prisión por haber participado del homicidio de Damián Rodríguez.
Ese mismo día la familia de Lautaro Gómez lloró el crimen de este joven de 16 años y papá de una beba. En el barrio La Herradura un disparo en la cabeza puso fin a su vida, lamentablemente.
Del 22 al 27 de julio se produjo una seguidilla de homicidios: Adriana Estéfano murió en Peralta Ramos Oeste, el 25 además del caso Guasone (detalle más arriba) fue encontrado muerto Sergio Palacios en el barrio Libertad con varias puñaladas. Y Lucas Ordoñez el 27. Tenía antecedentes y apareció al lado de un arma y su moto. Ocurrió en Bayley y Belgrano.
Como si esto fuera poco, Mar del Plata se llenó de preocupación con el crimen de un bebe de 18 meses que fue atacado a golpes por la pareja de su madre. Llegó con golpes al CAPS del Municipio. Murió en el Materno Infantil.
Las autoridades argumentan que la crecida de la violencia lleva de la mano situaciones de agresión permanente. La fiscal Andrea Gómez marcó un claro concepto en sus últimas declaraciones sobre el caso del DJ: "Mar del Plata está picante", dijo.
Y, además en su declaración de este lunes, remarcó que la "última barrida de la policía por el lugar fue a las 4,30", dejando en claro que la zona luego quedó liberada a su suerte...
Así están Mar del Plata y Batán por estas horas. Mientras se espera que se declare la Emergencia en Seguridad, hay una crecida del delito, robos a toda hora y en cualquier barrio. Ya no hay diferencias entre un sector de la periferia u otro a escasos metros del mar. ¿Hasta cuándo se puede tolerar todo esto, a horas de una temporada que promete ser espectacular?.